La curva de Phillips

Escribe Luis CASADO – 08/07/2008

Tú conoces el chiste del tipo que entra en una tienda de electrodomésticos y pregunta ¿cuánto vale la radio “Pilips”? El vendedor, que en eso es como el resto del personal y habla de “riteil”, de “reitin” y huevadas parecidas, le responde con voz FM: “La radio Filips señor, vale 10 UF”. El cliente se vuelve hacia otro equipo y pregunta: “¿Y este tocadiscos Pilips?” El vendedor, paciente, le contesta: “Ese “dividí” Ffffilips señor, vale 20 UFs”. El tipo suspira y exclama: “¡Ffutas que valen caros!”.

Si ignorabas porqué hasta el mote con huesillos te lo cifran en UFs te lo cuento pero no se lo digas a nadie: es para alimentar la inflación. Hasta el economista más boludo, -¡y mira que hay!-, sabe que aplicar índices para reajustar automáticamente los precios sirve precisamente para eso.

En la Francia que aún era social, -en la década de los 70-, los salarios se reajustabanen forma automática cada vez que el índice de precios progresaba más allá de una cierta cifra. Hasta que llegaron los sociatas al poder en 1981 y en nombre de la modernización de la economía se apresuraron a eliminar esa garantía social arguyendo que era generadora de inflación.

Contemporáneamente, en Chile, los economistas de la dictadura inventaron la UF que era lo mismo pero para los precios. Un artilugio generador de pingües beneficios para el mercado financiero. Si no sabías porqué los españoles compraron los bancos chilenos ahora lo sabes. De ese modo la gallada que pagó religiosamente las mensualidades de su casita durante años, descubrió que al cabo de todo ese tiempo debía más que al inicio. Y así. Tranquilo. Respira tranquilo. Lo que queda de PS, -un cuarterón de indigentes intelectuales mezclado a tres cuartos de putones verbeneros-, acaba de inventar el modo de luchar contra la inflación y la recesión. Es que son una especie de prototipo de lo que en aquella época llamábamos “huevones apillaos”.

El tercer acápite de las Resoluciones con “R” mayúscula del Pleno del Comité Central del Partido Socialista de Chile, reza textualmente:

“En general, el Comité Central del Partido Socialista reitera su compromiso y lealtad con el gobierno de la Presidenta Bachelet, solicitándole la pronta adopción de medidas que palíen la inflación y las amenazas de desaceleración económica, poniendo en juego ahora el carácter anticíclico de la política económica, para resguardar debidamente los intereses populares”(sic).

Perdónales el analfabetismo y concéntrate en “la pronta adopción de medidas que palíen la inflación y las amenazas de desaceleración económica”(resic).

Las conclusiones que puedes sacar de este galimatías son:

a) Eugenio González Rojas está muerto, bien muerto,

b) Salvador Allende murió y estos pendejos lo quieren matar de nuevo,

c) Los economistas del PS no asistieron al Pleno, de otro modo no se

entiende,

d) Las Resoluciones las redactó el barbouze iletrado de la Oficina.

Porque se ve que el Pleno del Comité Central del Partido Socialista de Chile, o para ser precisos de lo que queda, nunca oyó hablar ni del carácter inflacionario de la UF, ni de la curva de Phillips, se ruega pronunciar “Filips” como los cacharros esos que meten bulla, ya tú sabes.

El patriota Alban William Phillips, -economista neo-zelandés-, inventó en 1958 la curva que lleva su nombre. Dicha curva muestra que hay una relación empírica negativa (una relación inversa) entre la tasa de desempleo y la tasa de inflación. ¡No! ¡Sí!

Dicho en parlancia tuya y mía esto quiere decir que esta curva, -que Andrés Velasco conoce de memoria-, demuestra que no se puede reducir el desempleo sin aumentar la inflación, y viceversa.

En otras palabras, en la teoría económica en la que se educó Velasco es imposible luchar simultáneamente contra la inflación y contra el desempleo.

Hay que elegir: o lo uno o lo otro.

La inflación atenta contra los intereses de los rentistas, de los poderosos, mientras que el desempleo…

Toda esta vaina era para contarte que tal día como hoy el ministro de hacienda de la presidenta Michelle Bachelet, -que se pasa por las amígdalas del sur las Resoluciones con “R” mayúscula del Partido Socialista de Chile-, declaró, perentorio: “Vamos a derrotar la inflación”.

Y yo le creo. Mateo.